lunes, 29 de junio de 2009

La sabiduría oculta

Como hippies setenteros

El otro día cacé la parte final de Dune en el Canal 8. Muy emotiva, una de las mejores adaptaciones de novelas, en cuanto a captar la esencia de la obra. Con todos esos fremen barbudos tan auténticos, no como los de las nuevas versiones, recién salidos del set de maquillaje.

El caso es que la película tiene algunos puntos que siempre me han dejado un resquicio de inquietud, a pesar de gustarme. El uso de la voz, por ejemplo, en la novela la voz funcionaba como una herramienta de control de voluntades. Una Bene Gesserit entrena esta habilidad para, en momentos críticos, hacer sugerencias irresistibles, o, como mínimo, desestabilizar a un oponente para conseguir una ventaja. En la película la voz se proyecta a través de un micro y se utiliza como arma de energía. Películas y libros son cosas distintas y dependen de un lenguaje distinto, mi yo purista se debatía entre lo espectacular y conseguido que queda el arma de sonido en la peli y la perversión del espíritu original. Al final me quedo con las dos. Viviendo tan contento en la ambigüedad, que según Neal Stephenson es una prueba de inteligencia...

Otra licencia es la toma de la especia que convierte a Paul en el Kwisatz Haderach. Los poderes adquiridos van más allá de la presciencia del libro. Con el despertar del durmiente las reverendas madres (Alia, Jessica, Mohiam) empiezan a sangrar, convirtiendo la toma del agua de vida en un fenómeno compartido, telepático. En esta misma línea, más tarde, Paul se comunica mentalmente con Alia para cantarle cuando tiene que poner a volar al gordo flotante con un poquito de Gom Jabbar. Luego, el gusano de arena se come al gordo pervertido, para regocijo de todos. Este momento no me gustó del todo. El nacimiento de un Kwisatz Haderach, el que puede estar en varios sitios a a la vez, puede ser percibido por otros prescientes, como los navegantes de la cofradía, por el impacto que este hecho tiene en sus propias visiones, por como cambia el futuro, pero no es telepatía.

Dios creó Arrakis para probar a los fieles

El tercer chirrido fue la lluvia final, autentificando al mesías como elegido de Dios. Este final sí que va completamente contra el libro, concretamente contra dos ideas: la ecología y la manipulación religiosa. La ecología porque la modificación del clima de Arrakis se lleva a cabo a lo largo de años y la lluvia no llega hasta más tarde. Una parte importante de la trama gira en torno a los pequeños cambios en el planeta para convertir el desierto en un vergel. Acerca del punto religioso, la idea fundamental del libro es la manipulación de las creencias religiosas de individuos y masas, la introducción de un elemento sobrenatural sin justificación, pues...

viernes, 26 de junio de 2009

Hombres y niños

Y en ese mismo momento Sherman llevó a cabo un horrible descubrimiento, el mismo que todos los hombres , tarde o temprano, hacen en relación con su respectivo padre. Por vez primera comprendió que el anciano que tenía junto a él no era un padre envejecido sino un muchacho, un muchacho muy parecido al que había sido él mismo, un muchacho que creció, tuvo un hijo y, lo mejor que pudo, obedeciendo a su sentido del deber y también, quizás, por amor, adoptó un papel consistente en Ser Padre, a fin de que su hijo tuviera una figura mítica e infinitamente importante a su lado: la figura del Protector encargado de impedir que se destapara la caja que contenía todas las posibilidades de caos y desastre que la vida puede traer consigo. Y, ahora, ese muchacho, ese buen actor, se había hecho viejo, frágil, se había convertido en un ser cansado, mucho más cansado que nunca ante la perspectiva de tener que ponerse otra vez la armadura de Protector, cuando sus hombros ya no tenían fuerzas para cargar con ella.

La hoguera de las vanidades

Tom Wolfe

martes, 9 de junio de 2009